En los gobiernos federales del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y del Partido Acción Nacional (PAN), sobre todo en los del tricolor, los gobernadores de los estados eran puestos o removidos del cargo, por el secretario de Gobernación en turno, para nadie es un secreto ésto, incluso Carlos Loret de Mola, uno de los fundadores del PAN en Yucatán, narra en uno de sus libros "que a él, siendo senador de la República por el PRI, lo llamó el secretario de gobernación y le dijo "Usted ha sido designado por los sectores de nuestro partido como candidato a gobernador de Yucatán".
Así eran las cosas, Loret de Mola llegó al poder en 1969, mediante un enorme fraude electoral, ya que el que ganó las elecciones fue el candidato del Partido Acción Nacional (PAN), Víctor Manuel Correa Rachó. Parafraseando a AMLO, "Carlos Loret de Mola fue un gobernador espurio", que estuvo a punto de caer siempre por ordenes de Bucareli, cuando asesinaron al líder sindical Efraín Calderón Lara "El Charras", el 14 de febrero de 1974.
Febrero, es el mes de los gobernadores de Yucatán "renunciados" desde Bucareli, donde despachan los secretarios de Gobernación, encargados de manejar la política interior del país.
Luego de un pésimo gobierno al que llegó en 1988, pidió licencia al cargo de gobernador por "motivos de salud, Víctor Manzanilla Schaffer, el 14 de febrero de 1991, quien no supo gobernar, incluso apoyó a la panista Ana Rosa Payán Cervera a quien impuso como presidenta municipal de Mérida.
Ganó estas elecciones el caballeroso Herbé Rodríguez Abraham, recientemente fallecido (q.e.p.d.), pero el "triunfo" se lo dieron a la Payán, quien terminó renunciando a su partido.
Recuerdo que el presidente de la Comisión Electoral del Estado, el notario público don Julio Mejía Salazar, (q.e.p.d.), una eminencia como abogado y Luis María Aguilar Solís, comentaron "que el azul irá adelante porque el té (obviamente de manzanilla), lo ordenó".
Manzanilla culpó de su "renuncia" al entonces presidente de la República Carlos Salinas de Gortari y al político veracruzano don Fernando Gutiérrez Barrios.
Otro pésimo gobernador de Yucatán, Graciliano Alpuche Pinzón, quien ocupó el Palacio de la 61 por 60, en 1982, pidió licencia por "motivos de salud", el 16 de febrero de 1984. La corrupción de su gobierno llegó al Ayuntamiento de Mérida donde puso a uno de sus protegidos. Así que este mes de febrero es cuando mueven a gobernadores desde Bucareli, pero tranquilos, ahora con el gobierno de la 4T ya no se maneja así.
Por esas "licencias" por "motivos de salud", Yucatán y los yucatecos fueron beneficiados; los dos gobernantes removidos que no pudieron hacer su trabajo, fueron sustituidos por políticos capaces, conocedores del medio, de los problemas de la entidad y de la gente, don Víctor Cervera Pacheco (q.e.p.d.), quien fue un extraordinario gobernador y Dulce María Sauri Riancho, la única mujer capaz, trabajadora y talentosa que ha gobernado Yucatán.
DAVID BARRERA CANTO.- Mérida, Yucatán, 14 de febrero de 2023.-
(Foto del Archivo Gráfico de CAMBIO DEL SURESTE)