El partido MORENA en Yucatán, enfrenta desde hace más de dos años, antes de que saliera como candidato oficial a la gubernatura del Estado Joaquín Díaz Mena, quien fungía como súper delegado de la Secretaría del Bienestar en la entidad, una serie de conflictos internos, una división que ahora ya estalló, debido a los grandes intereses políticos y económicos que se mueven en el mismo. Nunca se le ha visto a Morena como a un partido que pudiera gobernar Yucatán, ha sido para quienes lo manejan un gran negocio, un botín con el que nunca soñaron.
Desde un principio una élite se apoderó del partido guinda en Yucatán, entre ellos muchos y muchas que no son yucatecos, como a una senadora (no yucateca) privilegiada por la 4T, los dineros del pueblo, aunque hablen de austeridad, no mentir, no robar y no traicionar, se han repartido en los bolsillos y cuentas bancarias de esta Casta Divina Morenista, algunos bañados en las aguas del Grijalva entre pejes o en los montes con zorras y mapaches.
Los conflictos en este partido guinda en Yucatán, al que antes nadie quería pertenecer y se rifaron los cargos públicos al águila o sol, han aumentado desde que los ambiciosos y los que tienen eterna sed de poder y de riquezas, de dinero mal habido, aunque presuman de ser los seguidores y herederos de Francisco I. Madero y de Benito Juárez y de su austeridad republicana, en el fondo son peores que los conservadores y los saqueadores profesionales del erario público.
Morena en Yucatán comenzó a llenar sus colmenas saturadas del tesoro público y de los cañonazos de billetes que les otorga el INE y el IEPAC y de otros gobiernos generosos de la 4T, de los chapulines y de los Judas de otros partidos, principalmente el PRI, el PAN y del PRD, que dividieron ya en su totalidad el partido guinda en Yucatán. Por estos traidores en los que sobresalen Rommel Pacheco Marrufo, Carlos Berlín Montero, Jorge Carlos Ramírez Marín, el ex panista y ex perredista Raúl Romero Chel, el ex perredista Alejandro Cuevas Mena, Pablo Gamboa Miner, Mauricio Sahuí Rivero y la reciente adquisición de los hijos del gran gobernador Víctor Cervera Pacheco (q.e.p.d), que han agigantado la división y el descontento en el guinda de la 4T en Yucatán, se puede pronosticar su derrota el 2 de junio próximo aún sin la ayuda de un oráculo o de un adivino.
El descontento de los verdaderos morenistas por haber visto atropellados sus derechos bien ganados como son el de dirigir los destinos de Morena en Yucatán en cargos directivos de este partido o a ser postulados a cargos públicos, por priistas, panistas y perredistas oportunistas, que se enriquecieron en gobiernos priistas y panistas, han destruido a Morena en Yucatán. Los chapulines y los Judas recogidos de otros partidos, serán el trampolín al vacío, el trampolín que llevará a la miasma a Morena en Yucatán.
DAVID BARRERA CANTO.- Mérida, Yuc., mayo 2 de 2024.-
Imagen de portada tomada de las redes sociales.
